Esta semana, aprovechando que la ciudad se llena de futuras bailarinas y bailarines, hemos tenido la suerte de hablar con Marina Quera, una de las fundadoras del Ballet de Catalunya y responsable de una parte importante del proyecto IBstage. Compra d’entrades
Al llegar al Instituto del Teatro nos recibe
Marina Quera, una apasionada del ballet que hace unos años comenzó a involucrarse con el proyecto de
IBstage y sus creadores. Nos cuenta que “IBstage” o
Il Balletto Stage fue un proyecto creado en la península Itálica por los bailarines y profesores
Leo Sorribes y
Elías García en 2008 y que hace seis años se trasladó a la península para terminar asentándose en la cercanías de Barcelona.
El proyecto inicial consistió en la creación de un curso internacional dirigido a bailarines jóvenes y futuros profesionales de la danza que tendrían la oportunidad de recibir clases magistrales de grandes figuras de renombre internacional y que, al final de la estancia podrían compartir con ellos escenario. La edición de este año, que tiene la característica de ser la décima, empezó el pasado 13 de agosto y se prolongará hasta el día 30 del mismo mes.
La dirección artística detrás del proyecto cuenta con sus dos fundadores pero también con
Xiomara Reyes, directora de la Washington Ballet School entre otras, así como de profesores y bailarines de gran renombre internacional como Samira Saidi, Piotr Nardelli, Larissa Lezhnina o Yumiko Takeshima, entre muchos otros.
Marina Quera nos cuenta como el objetivo de IBstage ha sido siempre el de construir y consolidar un espacio para el ballet, tanto clásico como moderno, en Catalunya, creando así espacios donde los talentos del país puedan establecerse y atraer figuras internacionales para crear una red que englobe también la península.
Es a raíz de esta filosofía que el año pasado se puso en marcha un proyecto muy ambicioso, la fundación del
Ballet de Catalunya, que tiene sede actual en Terrassa. El Ballet de Catalunya, producto directo e íntimamente relacionado con IBstage, rinde honor al proyecto madre compartiendo escenario con los estudiantes de la edición de este año y ofreciendo un recital en el Liceu con coreógrafos de gran renombre.
En esta décima edición de IBstage las Galas que se presentarán en el Liceo ofrecerán una muestra de las mejores coreografías del repertorio presentado en ediciones anteriores:
La Bayadère, El Corsario, Paquita y
La Bella Durmiente, y también llenarán el escenario del Liceu hasta con 12 artistas invitados.
Una vez dentro del Institut del Teatre, donde tienen lugar las clases magistrales durante las 3 semanas que dura el curso, nos invitan a asistir a dos de los numerosos ensayos abiertos que hay. Al entrar en la primera aula nos reciben las miradas curiosas de las jóvenes bailarinas que asisten a una de las clases magistrales de
Samira Saidi, antigua Directora de Danza de la English National Ballet School y fiel colaboradora del proyecto.
La segunda clase magistral a la que asistimos está dirigida por uno de los creadores del proyecto,
Elías García, que dirige apasionadamente a sus alumnos, un grupo de chicos en plena adolescencia llegados de todo el mundo.
En ambas ocasiones vemos que hay público dentro de las aulas, lo que se relaciona con una característica loable de la filosofía de IBstage y esta es que el proyecto abre sus puertas al público general con el objetivo de crear nuevos públicos, fomentar un espíritu crítico y ofrecer una experiencia muy curiosa para aquellas personas que no conocen el mundo del ballet clásico o que, por lo contrario, lo conocen con profundidad y quieren aprovechar la ocasión de ver grandes figuras de la danza en primera persona.
IBstage, una vez más, nos regala unas jornadas llenas de danza y movimiento que llenan la ciudad condal de futuros profesionales llenos de energía que estaban ansiosos por conocer y aprender de las bailarinas y bailarines que se establecen temporalmente en Barcelona para construir conjuntamente este proyecto que, a pesar de haber chocado con numerosas dificultades y de formar parte de esta época que tanto menudo dilapida la cultura, parece renacer de las ediciones anteriores aún con más fuerza.
Fotos: Mar Medinyà para Barcelona Clàssica.
